Distinguidos Señores de Diario Libre:Distinguidos señores del GNA y la SARD
Quien suscribe la presente, acompañado de los arquitectos Omar Rancier y Eugenio Perez Montas, junto al Licenciado Jose Chez Checo, inicio en 1986 -hace ya 20 años- el proceso mediante el cual en 1995 -9 años despues- fue cedido el edificio del antiguo Pabellon de Venezuela al Grupo Nuevarquitectura Inc. -GNA-, entidad fundad en 1979 -hace ya 28 años-. La Sociedad de Arquitectos de la Republica Dominicana -SARD- habia sido fundada el año antes, -en 1994- y por ello el GNA invito a la SARD para participar del proyecto de ocupacion y activación del inmueble y generar desde alli una propuesta cultural de alcances regionales, antillanos y caribeños.
Para que la embajadora de Venezuela, Doña Maria Clemencia Lopez de Jimenes cediera el inmueble, hubo que hacer experticios catastrales profesionales y hasta consulto la embajadora al extinto presidente Joaquin Balaguer, quien autorizo la cesion en el entendido de que dicho ediificio fue construido por Venezuela -Ministerio de Fomento-, a todo costo, y levantado en terrenos dominicanos cedidos para la "Feria de la Paz y Confraternidad del Mundo Libre", en 1955 -hace 52 años-.20 años despues el inmueble esta en un limbo juridico. Cierto. Edificio y terrenos viven un romance al margen de las legalidades comprensibles.
Pero no se trata de sentar jurisprudencia y usar la fuerza para hacer entendible lo que a todas luces no esta lo suficientemente claro. Se trata de respetar la cesion ejercida por una pasada embajadora de una pais hermano, como es Venezuela, cuyos lazos historicos desde la fundación de la nacionalidad dominicana vienen estrechandose cada vez mas.
Se trata de respetar el libre albedrio de una legacion diplomatica en usufructar un inmueble construido por el pais indicado que obtiene incluso el visto bueno del presidente dominicano de ese momento, para ejercer dicha cesion con las debidas pertinencias de indagaciones realizadas en el Ministerio de Fomento de Venezuela y la Cancilleria venezolana, y que sin embargo, seis años despues -en el 2001-, la cupula de turno del Senado de la Republica, decidio desconocer.Ahora ya no se trata de determinar un status legal.
De lo que se debe trata es de enmendar un entuerto producto de un exabrupto, con tipificaciones de un autoritarismo dictatoorial, burdo y grosero, que se realiza contra grupos pacifistas que no haran, ni pueden hacer, presiones politicas, ni economicas ni mucho menos sociales, porque son una minoria dedicada al desarrollo de una intelectualidad cultural que edifica en silencio un pais necesitado de orientacion estetica y funcional, por via del diseño arquitectonico y la arquitectura puesta al servicio de todos y todas.
De lo que se trata es de que se devuelva con respeto y solemnidad, propias no de aquellos sino de estos nuevos incumbentes senatoriales, un inmueble que espera por una campaña de recolecion de fondos, para recuperarlo de su lamentable abandono, porque es un edificio importante por su historia, por sus formas, por su presencia dentro del contexto urbano donde esta situado y dentro del contexto regional donde esta ubicado, y porque representa un vinculo inextrañable de la geografia cultural de dos pueblos, unidos en lo arquitectonico y lo documental.
Los arquitectos y arquitectas del pais, quieren volver a tener su sede en ese inmueble, donde ya antes, entre 1995 y el 2001, se realizaron diversas actividades culturales de amplia repercusion local, entre ellas mesas redondas, debates y conferencias, entre las que estuvo la que impartiera el inmortal arquitecto frances Andre J. Dunoyer de Segonzac.Esperamos que la dirigencia del Senado de la Republica se cubra de gloria al devolver ese inmueble a los arquitectos y arquitectas del pais, en la personeria juridica de la SARD y del GNA, para seguir intentando levantar, culturalmente, la bandera de las batallas por el intelecto y los conceptos aplicables a lo urbano y lo rural, para un mejor pais de cara al siglo XXI.
Emilio José Brea García